El Instituto Nacional de Migración (INM), dio a conocer que se mantiene atento para brindar la atención necesaria, en caso de ser necesario, a las personas integrantes de la XVI Marcha de Madres Centroamericanas que ingresaron a México el pasado 2 de mayo, y que se prevé permanezcan en territorio nacional alrededor de seis meses.
A golpes, una caravana migrante de aproximadamente mil personas fue detenida por la Guardia Nacional en su tercer intento por ingresar a México, a ocho kilómetros de Ciudad Hidalgo, comunidad fronteriza con Guatemala.
Tomadas de los brazos para formar una barrera, los integrantes de la caravana pedían que sus papeles fueran arreglados para poder ingresar sin violencia al país.
José Luis Morales, de origen salvadoreño, solicitaba que no se les subiera a los autobuses del Instituto Nacional de Migración (INM) porque de ahí “ya no bajaban”.
Un total de 110 de integrantes de la Caravana Migrante procedente de Honduras, fueron retornados a su país de origen por personal del Instituto Nacional de Migración (INM), en colaboración con elementos de la Guardia Nacional.
La Caravana Migrante ingresó al puente Rodolfo Robles al filo de las 05:00 horas de este lunes y emitió un documento dirigido al presidente Andrés Manuel López Obrador para que les permita libre tránsito y les otorgue un empleo.
De acuerdo con la casa del Migrante en Tecún Uman Guatemala, son alrededor de tres mil 500 personas, entre hombres, mujeres y niños, las que se concentraron en el lugar.
En caso de no tener acceso por el puerto fronterizo "tenemos un plan B", dijeron.
Los migrantes centroamericanos intentaron ingresar por el puente Rodolfo Roblesa a territorio mexicano, sin mostrar documentación a las autoridades migratorias, pero elementos de la Guardia Nacional cerraron la reja perimetral y los contuvieron con gas pimienta.
La turba trató de derribar la reja por lo que la Guardia Nacional les lanzó el gas para contenerlos. En el grupo de personas se encontraban mujeres, hombres, niños y ancianos, quienes desde la víspera esperaban al resto de la caravana que partió el 15 de enero desde Honduras hacia México.
La Secretaría de Gobernación (Segob) informó que para la atención a los migrantes hondureños, que iniciaron su arribo a México por puntos fronterizos del estado de Chiapas, el Instituto Nacional de Migración (INM), en coordinación con la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), atenderá sus trámites para el ingreso regular, ordenado y seguro, conforme a las leyes.
“Quienes de manera libre y voluntaria lo decidan, podrán permanecer en México en calidad de trabajadores temporales dentro de la zona sur del territorio nacional”, indicó.
La Caravana de Madres Centroamericanas en Busca de sus Migrantes Desaparecidos llegó al Antiguo Colegio de San Ildefonso para exigir al Gobierno de México “voluntad política” para dar con el paradero de sus hijos.
