Al año se registran en México, poco más de 11 mil nuevos contagios de VIH, de los cuales el 45 por ciento corresponden a jóvenes de entre 15 y 29 años de edad, lo que representa un foco de alerta.
Lo anterior lo reconoció Alethese de la Torre, directora general del Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH/Sida (Conasida), quien destacó que nuestro país y el mundo están lejos de acabar con esta epidemia.
“Sin duda alguna la epidemia del VIH continúa siendo un problema de salud pública en nuestro país, y se estima que 230 mil personas viven con VIH en México; por diversos motivos, miles de personas no acceden a la información o insumos necesarios para prevenir nuevas infecciones, en el período de 2014 a 2018 se registraron 68 mil 807 nuevos casos de VIH”, manifestó.
En el marco de la conmemoración del Día Mundial de la Lucha contra el VIH-Sida, Héctor Miguel Corral, vocal ciudadano del Conasida alzó la voz para reclamar a nombre de la sociedad civil la crisis por la falta de anti-retrovirales en el país y la eliminación de apoyos a las organizaciones no gubernamentales en tareas de prevención, que de 2006 a 2018 recibieron financiamiento por 777 millones de pesos, a través de convocatorias públicas.
“Todavía en diferentes puntos de la República, se siguen reportando casos de desabasto de retrovirales, debido a las dificultades que se presentaron en el proceso de su compra y distribución, a partir de los cambios implementados por la actual administración, lo que pone en peligro la supresión viral y la calidad de vida de las personas que viven con VIH”, lamentó.
En respuesta, Hugo López Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud explicó que la falta de anti-retrovirales se debió a que se buscó mejorar los tratamientos con insumos de alta calidad, seguridad y eficacia, pero también proteger las finanzas públicas de distintos intereses privados, generalmente especulativos, que llevaban a que el país pagara un sobreprecio no justificado.
“Teníamos como país un importantísimo rezago en actualizar los esquemas de tratamiento antiretroviral, el resultado neto que todas y todos conocen es que hoy tenemos el esquema más completo, más moderno de antiretrovirales en América Latina, y no sólo eso, sino que además lo logramos tener a mitad de costo. En la sociedad, en los medios públicos, se ha querido enfatizar el tema del costo como si nosotros hubiéramos tenido la intención de ahorrar en vez de lo que realmente era y sigue siendo para los demás elementos, la intención de tener los mejores elementos pero también en el mejor costo posible”, destacó.
Hugo López Gatell abundó que el desabasto de anti-retrovirales se registra en el último tramo de la distribución de insumos, cuando ya están en los almacenes centrales y las autoridades estatales tienen problemas para entregarlos a las unidades e instituciones de salud.
Agregó que otro factor es que aún subsisten malas prácticas de servidores públicos, como los responsables de las farmacias, que simplemente no quieren surtir los anti-retrovirales, por lo que exhortó a la ciudadanía a denunciar cualquier incumplimiento al derecho a una atención a la salud universal con acceso a medicamentos gratuitos.
Sobre la falta de presupuesto para las organizaciones de la sociedad civil, señaló que después de hacer un estudio, la Secretaría de Salud se dio cuenta que no hay evidencia clara que con este mecanismo se haya logrado el máximo efecto posible en las tareas de prevención, ya que el 50 por ciento de las personas que acuden por primera vez para recibir tratamiento por contagio de VIH, lo hacen cuando “es demasiado tarde y hay un daño catastrófico a su sistema inmunológico, pues tardaron entre 7 y 10 años en conocer que padecían esta enfermedad”.
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