El Colectivo Agua Clima, del que forma parte Greenpeace México, envió una carta a los candidatos a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, Santiago Taboada y Salomón Chertorivski, pidiéndoles actuar urgentemente ante la reducción crítica del abasto de agua en la capital del país y para que en caso de ganar en las urnas, se comprometan a una gestión con enfoque ambiental, de género y justicia social.
En la misiva, las organizaciones de la sociedad civil solicitan a los aspirantes comprometerse con la agenda del agua para garantizar un acceso justo y equitativo al recurso, aumetando drásticamente el compromiso con la protección de ecosistemas que son imprescindibles para la recarga de los acuíferos de los que depende la metropoli.
"Si este problema no se atiende de raíz, no habrán pipas que alcancen para satisfacer las necesidades de la población. A esto se suma que el Cutzamala es una infraestructura cada vez menos compatible con la crisis climática. Este sistema ha despojado del agua a las poblaciones que habitan donde ésta se extrae, además tiene un altísimo costo ambiental, comparable incluso con el de la ciudad de Puebla, pues depende de un consumo energético a base de combustibles fósiles contaminantes", manifestaron.
El Colectivo Agua Clima, advirtió que es urgente modificar la gestión del agua en la Ciudad de México para lograr una verdadera justicia hídrica, equidad y respeto a los derechos humanos, con compromisos y estrategias claras para atender las siguientes problemáticas:
●Tratamiento inadecuado de aguas residuales: La falta de tratamiento de aguas residuales, que actualmente no supera el 15 por ciento del volumen total, representa una amenaza directa a la salud pública y al entorno ambiental. La elevación significativa de este porcentaje es una necesidad urgente para salvaguardar la vida de los ciudadanos y preservar nuestro medio ambiente.
● Infraestructura insuficiente para inundaciones: La carencia de infraestructura descentralizada para el tratamiento de aguas residuales durante eventos climáticos extremos ha generado dilemas, como la decisión de inundar Tula, Hidalgo, en 2021. Urgimos la inversión en infraestructura eficiente y proyectos que reduzcan el desperdicio de agua de lluvia, priorizando la equidad y la seguridad de comunidades vulnerables.
● Pérdida de zonas de valor ambiental: La tala ilegal en el Bosque de Agua, vital para la recarga de acuíferos en la CDMX, representa un atentado contra la sostenibilidad. Detener esta pérdida y conservar estos ecosistemas es esencial para el rescate de la cuenca y la justicia ambiental.
● Contaminación industrial y agrícola: Las descargas tóxicas de industrias y la contaminación agrícola afectan la calidad del agua. Reforzar regulaciones y sanciones es imperativo para garantizar la justicia y la equidad en el acceso a un recurso vital.
● Falta de participación ciudadana en el Plan General de Ordenamiento Territorial (PGOT): La creación del Plan General de Ordenamiento Territorial (PGOT) ha sido un proceso carente de participación ciudadana legítima. Numerosos núcleos vecinales y pueblos indígenas han protestado ante la falta de transparencia, especialmente en zonas donde el acceso al agua potable es problemático. Urgimos a replantear este proceso para asegurar una planificación urbana participativa que considere las necesidades de toda la ciudadanía.
● Crecimiento urbano y desarrollos inmobiliarios: Derivado de la falta de un instrumento adecuado de planeación, el crecimiento urbano descontrolado y los desarrollos inmobiliarios sin consideración ambiental amenazan directamente la sostenibilidad de la ciudad y la justicia en el acceso al agua. Es crucial evaluar y detener proyectos incompatibles con la visión de rescate de la cuenca, priorizando la regeneración sobre el desarrollo incompatible.
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