Nana se disipó anoche en los límites de Guatemala con México y sus remanentes originaron una zona de baja presión, ahora con 30 por ciento de probabilidad de desarrollo ciclónico.
El sistema se localiza en tierra, sobre Chiapas, aproximadamente a 95 kilómetros al oeste-suroeste de Boca de Pijijiapan, y se desplaza hacia el oeste-noroeste, por lo que el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), vigila su evolución y trayectoria.
La zona de baja presión ocasionará lluvias puntuales torrenciales (de 150 a 250 milímetros) en Oaxaca, Puebla y Veracruz; intensas (de 75 a 150 milímetros) en regiones de Chiapas, Guerrero y Tabasco, y muy fuertes (de 50 a 75 milímetros) en zonas de Campeche y Quintana Roo.
Además de vientos fuertes con rachas de 60 a 70 kilómetros por hora y oleaje de 1 a 2 metros de altura en el Golfo de Tehuantepec.
Debido al riesgo de deslaves, desbordamiento de ríos y arroyos e inundaciones en zonas bajas, se exhorta a la población y a la navegación marítima a atender los avisos de Protección Civil.
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